El jamón ibérico, incluida la grasa y el veteado de la grasa adyacente a acompañar a la banda, tiene un valor energético de 291 kcal/100 g de ibérico. El perfil de ácidos grasos, rica en ácidos grasos monoinsaturados, como el ácido oleico es muy adecuado para las recomendaciones dietéticas más recientes consideran una grasa saludable.
El respeto del contenido de colesterol, la tasa (30-40 mg/100 g) es incluso menor que el de las carnes magras como el pollo o el pavo. El jamón ibérico se caracteriza también por su contenido de vitaminas B1, ácido B6, B12 y ácido fólico, muy beneficiosas para el sistema nervioso y la vitamina E, que actúa como un antioxidante.
Este es un producto rico en minerales tales como hierro, fósforo, potasio, magnesio y zinc.
Por último, tiene un alto contenido de proteínas de alta calidad y digestibilidad debido a la proteolisis que se produce durante la maduración de este producto. Recientes estudios de la Fundación Jamón Serrano (2006) señalan que, además, es un producto bajo en calorías que no engorda y es recomendado para cualquier programa de pérdida de poids.De Del mismo modo, los elementos traza (principalmente Fe y Zn) para proporcionar efectos muy beneficiosos, entre otros, niños, deportistas, personas con anemia y como anti-estrés.